Hace poco una seguidora del Facebook nos pidió que si podíamos explicar algo sobre la Spirulina y que había de cierto en ella y la verdad que la propuesta nos pareció interesante y nos pusimos manos a la obra para buscar más información de la que teníamos sobre la misma.
Pero… ¿Qué es la Spirulina?
La Spirulina, al contrario de lo que la mayoría de la gente se cree, no es un alga, es un compuesto dietético elaborado a base de cianobacterias (algas verdes azuladas) , o lo que es lo mismo, es una bacteria.
¿Es una moda?
El consumo de la Spirulina en alimentación no es una novedad (aunque ahora sea “la panacea”) existen evidencias científicas, como bien dice Wikipedia https://es.wikipedia.org/wiki/Spirulina_(suplemento_diet%C3%A9tico) de que ya los aztecas la consumían en forma de galletas y a partir de 1962 se empezó a comercializar.
Pero está claro que ahora más que nunca, las algas están de moda, ya no son sólo cosa de los japoneses, hemos pasado de apartarlas con los pies en la playa a quererlas incluir en nuestros platos.
Y es que según publicaba el diario La Razón en el mes de marzo http://www.larazon.es/atusalud/spirulina-el-alga-que-triplica-en-proteinas-al-pollo-HC9260485#.Ttt1ZaYJNklm4NX organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de Naciones Unidas (ONU) tratan de “super alimento” a esta alga.
Pero… ¿Qué tiene de bueno su consumo?
Tiene un gran valor nutricional, ya que posee un elevado contenido proteico (60-65% de su peso en seco), es rica en aminoácidos esenciales, ácidos grasos poliinsaturados y vitaminas A, B12 (no biodisponible), B1, B2 y E, además de minerales, como zinc, magnesio, calcio, hierro, y fósforo, entre otros.
A la Spirulina se le atribuyen propiedades como:
65% proteína vegetal completamente digerible.
Excelente fuente de minerales y vitaminas del grupo B principalmente
Favorece el tránsito intestinal
Tiene propiedades de “desintoxicación”.
Posee ácidos grasos esenciales importantes para la salud y también para el pelo, uñas y piel.
¿Y de malo?
Principalmente hay que tener en cuenta que la Spirulina no se comercializa como un alimento, sino como un suplemento dietético y como ello, nunca debe ser sustituto de una buena alimentación.
Pero, ¿qué hay del yodo que contiene? En general las algas contienen un notable contenido de nutrientes, como podemos ver, pero su contenido en yodo demasiado alto. El yodo es un mineral que, en exceso, es peligroso (puede causar problemas tiroideos).
TIPO DE ALGA |
YODO (mg/8gr agua) |
KOMBU |
34 |
HIERBA DE MAR |
1,3 |
Un ejemplo: un solo gramo de la alga kombu o hierba de mar, multiplica por 5 y por 8, respectivamente, el límite máximo de consumo de yodo (IDR) establecido por las autoridades sanitarias.
Por lo tanto, el consumo habitual de la mayor parte de algas comestibles puede ser perjudicial para la tiroides, provocando hiper o hipotiroidismo.
Pero si hay un colectivo propenso a consumir algas, son los vegetarianos por la idea de su alto contenido en hierro y vitamina B12. En cuanto al hierro, no deberían seguir ninguna recomendación diferente a llevar una dieta equilibrada (vegetariana por supuesto) y si existe anemia, el suplemento indicado y la dosis indicada que marca el médico. Con respecto a la vitamina B12, como ya adelantaba en su valor nutricional, ésta no es biodisponible para el cuerpo humano, o lo que es lo mismo, nuestro organismo no la utiliza como vitamina B12, por lo tanto no sirve de nada como suplemento para dicha carencia.
En definitiva…¿Es conveniente su consumo?
Es un error recomendar algas para suplir deficiencias nutricionales y también lo es creer que las algas son la panacea y que lo ideal es incluirlas en nuestra dieta de forma habitual, ya que su alto contenido en yodo puede tener efectos perjudiciales, y por el contrario, el resto de nutrientes que aportan podemos conseguirlo de una alimentación equilibrada.
Y por supuesto, otro error es creer que tomar algas compensa nuestras escabechinas nutricionales haciendo de desintoxicante o “batidos detox” que están tan de moda también.
Concluyendo, no te esfuerces en comer algo cuyo sabor no te convence y busca alternativas que te resulten más apetecibles. Y no hagas caso tampoco de alguno de sus “beneficios milagro” que las presentan como poder reductor, desintoxicantes y anticelulíticas, si adelgazas con ellas es porque comes menos que antes y cuidas más tu estilo de vida, no son la panacea y por supuesto, una vez más… no es oro todo lo que reluce!